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INSTITUTO DE LOS ANDES

EL BAR DE HIELO EN SHANGHAI

Instituto de los Andes - Panel: La Revista 

Por: José Álvarez Díaz - Shanghai, (EFECOM).- El primer "bar de hielo" de China, construido con más de 45 toneladas de hielo traído de Suecia, aspira a convertirse en un atractivo turístico por sí mismo y en un local de referencia de la noche de Shanghai, la ciudad con fama de más extrovertida y cosmopolita del gigante asiático.

"Queremos que se convierta en una atracción de moda de Shanghai, que cada vez que la gente visite esta ciudad también se acerque a visitar este tipo de bar tan difícil de encontrar en Asia", explicó a Efe Anna Chau, empresaria hongkonguesa con más de 40 restaurantes temáticos, que tuvo la idea de montar el local.

Situado en una de las principales avenidas de la ciudad, Huaihai Zhong Lu, en la antigua concesión francesa, sus paredes, sus muebles, su decoración y hasta sus vasos, de un solo uso, están esculpidos con hielo del río Torne, en Laponia (Suecia), y serán renovados cada seis meses, después de viajar casi 30.000 kilómetros.

El bar se abrió hace tres semanas, en pleno azote del intenso calor pegajoso característico de la húmeda Shanghai, y para sus primeros clientes está suponiendo el atractivo adicional de un cambio de temperatura, casi repentino, de cerca de 40 grados centígrados, ya que el local se mantiene a cinco grados bajo cero.

"El bar de hielo te permite una pausa, pasar de la contaminación y el calor sofocante de Shanghai a un entorno frío y limpio para refrescar la mente", comentó Sophia Duménil, encargada de mercadotecnia del local, una franquicia de la firma sueca Icehotel patrocinado por la marca de vodka también sueca Absolut.

Sus cinco grados bajo cero son "la temperatura ideal, tanto para el cuerpo humano en un entorno como este, como para que no se te quede la lengua pegada al vaso de hielo", explicó, mientras Chau destacó que su objetivo es permitir el disfrute de la bebida y del hielo "con todos los sentidos", el placer de "chupar el hielo".

"Es un hielo muy especial, porque el agua del río Torne es tal vez la más clara y más pura del mundo", aseguró Duménil, "que da lugar a una cristalización preciosa, porque cuando se forma casi no queda oxígeno dentro, así que sale un hielo muy compacto, muy transparente y muy suave".

El bar, de 100 metros cuadrados, y donde se permite un máximo de 60 personas durante no más de 45 minutos a cada visitante, al que se ofrece una capa de piel y guantes para aislarlo del frío y proteger al hielo de su calor corporal, está decorado con esculturas de agua helada, y sólo las sillas están guarnecidas con pieles.

En la barra, o en mesas translúcidas y gélidas, se sirven cócteles basados en vodka o zumos naturales, que por su ausencia de alcohol se solidifican con rapidez y deben ser removidos constantemente.

Dentro todo está hecho de hielo, salvo el techo y el suelo, y la decoración, que también se renueva cada seis meses, combina formas cuidadosamente diseñadas, ahora inspiradas en los paisajes árticos, con una técnica propia de la franquicia sueca, que permite "pintar" introduciendo nieve a capricho en bloques de hielo transparentes.

Con un horario muy chino (de doce a doce, hasta la una de la madrugada los sábados), hasta la fecha ha sido visitado por centenares de clientes, la mayoría de ellos turistas, según Chau, además de expatriados y hombres de negocios locales, familias con niños pequeños e incluso ya se ha celebrado una boda en su interior.

"Es un sitio muy 'cool' (juego de palabras entre "guay" y "fresco")", dijo a Efe un cliente surcoreano, que se identificó como Edward. "Trabajo aquí al lado y creo que este verano voy a venir a menudo".

"En Shanghai hay constantemente turistas de todo el mundo, además de gente de negocios que viene a la ciudad cada cierto tiempo y sabemos que poco a poco irán trayendo a sus amigos y dando a conocer el bar boca a boca", concluyó Chau, que importará entre 40 y 50 toneladas de hielo dos veces al año, incluidos unos 50.000 vasos.

La empresa sueca Icehotel, que construye un hotel de hielo todos los años en Jukkasjärvi (Laponia, Suecia), que dura unos cuatro meses hasta que se derrite, tiene otros seis bares parecidos en esa ciudad y en Estocolmo, Milán, Londres, Copenhague y Tokio, aunque le han salido imitadores en Finlandia, Francia, Rumanía y Sudáfrica. EFECOM -jad/mz/vnz - http://groups.msn.com/institutodelosandes

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