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INSTITUTO DE LOS ANDES

03 COCINA CON VINO

SOLOMILLO CON SALSA DE VINO

 

General
un poco de aceite (para untar los filetes)
2 chalotas picadas
2 hojas de estragón
40 gramos de mantequilla
3 ramitas de perifollo
sal
1 y 1/2 cucharadas soperas de salsa de tomate espesa
4 filetes de solomillo
1 vaso (de los de vino, no lleno) de vinagre
1 vaso (de los de vino, no lleno) de vino blanco
3 yemas de huevo


Preparación:
Prepare la salsa poniendo en una cacerola el vino blanco con el vinagre, las chalotas picadas, las hojas de estragón y las ramitas de perifollo. Cuézalo hasta que se reduzca a la mitad. Pásela por el chino (un colador de agujeros grandes), apretando bien. Añada las yemas de huevo y un poco de mantequilla y remueva bien, con ayuda de una cuchara de madera, al calor, pero sin que llegue a cocer. Deberá quedar con una consistencia como de mayonesa clara. Añada entonces la salsa de tomate espesa y vuelva a remover hasta que quede todo bien mezclado. Reserve al calor. Ponga la plancha sobre el fuego y, cuando esté bien caliente, haga sobre ella los filetes de solomillo, que habrá untado previamente por ambos lados con aceite. Déjelos hasta que se queden bien marcadas las rayas de la plancha, pero que por dentro quede rosado (o al punto que usted prefiera la carne). Vierta la salsa sobre los filetes y sirva. Receta enviada por: Miriam Huaman
 

SOLOMILLO CON SALSA DE VINO

 

General
un poco de aceite (para untar los filetes)
2 chalotas picadas
2 hojas de estragón
40 gramos de mantequilla
3 ramitas de perifollo
sal
1 y 1/2 cucharadas soperas de salsa de tomate espesa
4 filetes de solomillo
1 vaso (de los de vino, no lleno) de vinagre
1 vaso (de los de vino, no lleno) de vino blanco
3 yemas de huevo


Preparación:
Prepare la salsa poniendo en una cacerola el vino blanco con el vinagre, las chalotas picadas, las hojas de estragón y las ramitas de perifollo. Cuézalo hasta que se reduzca a la mitad. Pásela por el chino (un colador de agujeros grandes), apretando bien. Añada las yemas de huevo y un poco de mantequilla y remueva bien, con ayuda de una cuchara de madera, al calor, pero sin que llegue a cocer. Deberá quedar con una consistencia como de mayonesa clara. Añada entonces la salsa de tomate espesa y vuelva a remover hasta que quede todo bien mezclado. Reserve al calor. Ponga la plancha sobre el fuego y, cuando esté bien caliente, haga sobre ella los filetes de solomillo, que habrá untado previamente por ambos lados con aceite. Déjelos hasta que se queden bien marcadas las rayas de la plancha, pero que por dentro quede rosado (o al punto que usted prefiera la carne). Vierta la salsa sobre los filetes y sirva.